Las fuerzas armadas israelíes continúan cerrando el paso fronterizo de Rafah en la Franja de Gaza al tiempo que la ONU advierte que Israel está “obstruyendo el ingreso de ayuda humanitaria vital”. El organismo internacional agregó que muchos de los 600.000 niños y niñas que se refugian en Rafah se encuentran “altamente vulnerables y al borde de la supervivencia”. Asimismo, Save the Children advirtió que las operaciones de ayuda humanitaria “se paralizarán por completo” si Israel no detiene su ofensiva en Rafah. La organización de ayuda humanitaria afirma que tres cuartas partes de todos los pacientes menores de edad que han sido atendidos en la llamada “zona segura” cerca de Rafah presentan heridas causadas por explosiones. Decenas de miles de palestinos se han visto obligados a desplazarse nuevamente, aunque muchos de ellos afirman que no saben adónde ir y que no hay ningún lugar seguro donde refugiarse en Gaza. Mientras Israel se prepara para una invasión terrestre a gran escala en Rafah, los palestinos continúan muriendo a causa de ataques aéreos.
Mohammed Khalil Abu Kaynass: “Estábamos horneando pan. De repente, nos encontramos con sangre y mártires dispersos por todas partes. Estamos recogiendo los pedazos de sus cuerpos. Llegó personal de Defensa Civil y recogió los cuerpos desmembrados. Mi amigo murió. También recogieron sus pedazos. Todo está hecho pedazos”.
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